Las grosellas son una fruta del bosque muy apreciada por su sabor dulce y ácido. Su época de cosecha es en verano y puede durar varias semanas. Si tienes un jardín o huerto en casa, aquí te dejamos algunos consejos para tener una cosecha abundante de grosellas.

1. Elige el lugar adecuado

Las grosellas crecen mejor en suelos que retengan la humedad pero que no se encharquen. Además, necesitan una buena cantidad de sol pero también pueden tolerar sombra parcial. Si vives en una zona cálida, es importante que las plantes en un lugar que tenga sombra durante las horas más calurosas del día. Asimismo, procura plantarlas en un lugar con buen drenaje.

2. Elige la variedad adecuada

Existen diferentes variedades de grosellas y algunas se adaptarán mejor a tu clima y condiciones de suelo específicas. Comprueba en la tienda o vivero que la variedad que elijas sea resistente a enfermedades comunes como el mildiu polvoriento y la antracnosis.

3. Prepara el suelo correctamente

Antes de plantar, prepara el suelo mediante labrado o remoción del suelo y la incorporación de materia orgánica. Además, asegúrate de que el pH del suelo esté en el rango adecuado, entre 6 y 6,5 para grosellas.

4. Planta correctamente

Planta las grosellas a una distancia de al menos 1,2 metros entre plantas y 1,8 metros entre las filas. Asimismo, asegúrate de plantarlas a la profundidad adecuada y de que las raíces estén bien colocadas y cubiertas de tierra. Una vez plantadas, riega bien y añade una capa de mantillo para mantener la humedad del suelo.

5. Proporciona el cuidado necesario

Las grosellas necesitan suficiente agua durante la temporada de crecimiento. Asegúrate de regarlas regularmente y por lo menos una vez a la semana. Al igual que cualquier otra planta, necesitarán ser podadas regularmente para asegurar un crecimiento saludable y fuerte. Además, siempre está atento a cualquier señal de enfermedad y trata el problema tan pronto como lo detectes.

6. Protege a las plantas de los depredadores naturales

Los pájaros pueden ser un problema al atacar las grosellas antes de que puedas cosecharlas. Para evitar este problema, cúbrete las plantas con redes de protección o espantapájaros. Asimismo, también debes estar atento a las enfermedades de los insectos y usar los pesticidas adecuados. Sin embargo, procura usar pesticidas naturales y evita los químicos tóxicos siempre que sea posible.

7. Cosecha en el momento adecuado

Cosecha las grosellas cuando estén completamente maduras y suaves al tacto. La mejor manera de cosecharlas es recogerlas manualmente, para evitar dañar los frutos. Si esperas mucho tiempo, los frutos se ablandarán y no serán tan dulces como deberían ser.

8. Almacena adecuadamente

Las grosellas son muy perecederas y sólo durarán unos pocos días si se guardan a temperatura ambiente. Es mejor guardarlas en el refrigerador o congelarlas para que puedas disfrutarlas durante todo el año. Si las congelas, limpia y seca los frutos primero y luego colócalos en una bolsa de plástico herméticamente sellada para conservar su sabor y frescura.

Conclusión

Cultivar grosellas no es difícil, pero requiere un poco de atención y cuidado para asegurar una cosecha abundante. Con estos consejos, estarás un paso más cerca de tener una cosecha de grosellas que puedas disfrutar durante todo el verano.